sábado, 18 de octubre de 2008

"LA COLABORACIÓN"


Amigos y amigas, si aun no lo saben, me he mudado de casa. Y en el transcurso de la mudanza me sucedió algo anecdótico, que me gustaría contarles.
Para dicha mudanza no contrate a personas encargadas para dicho trabajo. Preferí hacerlo yo mismo, con la ayuda de un buen amigo. Hicimos la mudanza por la noche para evitar la mirada de curiosos.
Era, por fin, el último viaje. El auto parecía de un Ekeko. Las cosas estaban unas sobre otras en el techo del auto; en su interior había un desorden que yo, a las justas, lo entendía. En el trayecto del viaje un uniformado (policía), detuvo nuestra marcha.
Él se acerco hacia nosotros y me pidió los documentos del auto, a los que yo muy gentilmente le hice entrega. Todo estaba conforme. Luego, el uniformado me pidió una autorización para efectuar la mudanza (¡). A lo que yo le dije que no tenía ninguna autorización (¿por qué tendríamos que comunicar a la policía nuestra mudanza? ¿para evitar una presunta sospecha de robo?).
No tenía en ese momento ninguna autorización y el policía amenazaba con llevarme a una Comisaría. Salvo que yo "le colaborará con alguito".
Cuando me dijo eso sabía perfectamente que me estaba pediendo una coima. Pero me hice el "loco". Y le dije ¿What’s? Luego él me dijo que si le podría colaborar con un galón de combustible. Yo le dije que no tenía ni un cobre. Después me dijo que le diera lo que tenga. Cuando me dijo eso no sabía que hacer; me sentía como si el uniformado me estuviera asaltando. No me quedo otra cosa que decirle: Prefiero acompañarle a la Comisaría. Luego él procedió a hacerme entrega de mis documentos, y me dijo que prosiga mi marcha.
Mientras conducía mi Nissan Sunny del año del queque, mi amigo me preguntó si todo estaba Ok. Yo le dije que sí. Sin embargo, un sabor amargo me invadía: porque no le había dado el gusto de darle plata; porque me pareció muy criminal su actitud; por no haber sacado una autorización para hacer la mudanza...
Me puse a pensar si a mí, simple ciudadano, me piden una pequeña "colaboración", cuánto será la colaboración que les pidan a las empresas que tienen mucha plata. O viceversa, cuánto ofrecerán ésas empresas a las autoridades ¿US$ 100, 000 dolares, como la coima del Caso Petrogate - Quimper Herrera y Rómulo León? Difícil de saberlo, pero fácil sospecharlo.

9 comentarios:

yui dijo...

un buen post alexciño!! si la famosa "colaboración"como no tratar de compararlo con el caso de escándalo que sacudió a la más altas esferas de gobierno.. estas cosas no solo pasan en nuestro país pero al menos debemos hacer algo para no sucumbir a la tentación, mucho menos aceptarlo
muy buena decisión .. no darle gusto a quien dice representar la autoridad..

Alex Choquemamani dijo...

Hola Judith!
La corrupción es uno de los tantos problemas que padece nuestro querido país; muchos casos son consentidos por la población, que podría ser visto como cierta complicidad. Recordemos aquella frase, que de vez en cuando uno escucha: "Que robe pero que haga obras". ¿En qué quedamos?
El trabajo está tanto desde las instituciones y la sociedad civil. El rol de esta última es determinante.

Besos.

Alex

Edilberto dijo...

Hola, Alex. Te imagino en ese trance con el policia pedigûeño. Pero, ojo èl en algo tenìa razòn: era necesario que tengas una autorizaciòn para la mudanza.

Alex Choquemamani dijo...

Es cierto Edilberto, tenía que haber sacado una autorización. Por eso decidí acompañar al uniformado a la Comisaría (debo confesar que lo pensé con mucha resignación, no me quedaba otra).
Y con esto no quiero mostrarme como moralista. No. Tenía que seguir las consecuencias establecidas por las normas; pero, al final esa decisión (aparentemente la peor) me trajo menos problemas. Yo no dí la coima y el policia opto por soltarme y seguir mi marcha.

Giovanni Fabrizio dijo...

Hola, amigo... No sabía que te habías mudado... Otra vez con las estudiantes de medicina?? Provecho!!! Jo, Jo, Jo!!! Amigo, lástima lo del Policía: lo dejaste sin su par de chelas para el fin de semana o sin sus cigarros para ese momento. Si queremos cambiar a nuestro país, empecemos con nosotros mismos. Gracias por recordarnos cómo hacerlo. Un abrazo, mi estimado Álex, el León!!

Alex Choquemamani dijo...

Querido Giova!!! Gracias por tu visita a este blog y por tu comentario.
Ahora estoy viviendo con unas amiguitas algo maduritas (jejeje).
Si pues le deje al tombo sin el fin de semana (tenía que preferir el mío).
Un abrazo Giova.

Andrés Huallpa Rimachi dijo...

Hey, tìo, cómo es posible que seas tan tacaño que no compartes tu riqueza con un pobre servidor público como es un policía, que gana 800 soles, algo que para ti es una propina... ¡Y después te quejas que el mundo es injusto!... Habrase visto...

Alex Choquemamani dijo...

Estimado Jorge, tenía que preferir mis chelas que a sus chelas (era sábado de juerga).

Unknown dijo...

en este la corruptio se ha establecido como un modus vivendi en todos los sectores, para que se de esta claro que debe existir dos agentes: el corruptor y el corrompido(sujetos activo y pasivo respectivamente) si se considera a la corrupcion como un criterio subjetivo lo podemos sancionar, es decir lo podemos penalizar sin que ello signifique que tendra un gran impacto en la sociedad, en cambio si de cierta forma la catalogamos como traicion a la patria( esto debido a que los funcionarios publicos estan revestidos de poder publico, actuan en nombre y representacion del estado)si tan solo pudiera aplicarse la pena capital para los agentes de la corruptio, seria una innovacion en materia de derecho penal y un gran avance en la lucha contra la corrupcion en america latina