En el Perú tenemos abundantes partidos de fútbol durante el año e incluso algunos tienen sus favoritos: la U., Alianza Lima, Sporting Cristal, pero cosa distinta sucede en la escena política nacional: ¿existen todavía partidos políticos en el Perú?
Por obra y gracia de Alberto Fujimori, quien fundó los movimientos "independientes" y diseño una campaña de despestigio contra los partidos políticos tradicionales, estos entraron en crisis, y el pueblo peruano remató dicha campaña desencantándose de ellos.
La década del '90 es una etapa crucial en lo que respecta la forma de hacer política, o mejor dicho, cómo y mediante qué se hace política. En dicha década comienzan a proliferar los movimientos independientes que aparecen tan solomante para los comicios electorales y el resto de tiempo brillan por su ausencia. Este fenómeno de hacer política ha calado muy hondo en la sociedad civil, ya que no existen mecanismos (o puentes) entre el Estado y la sociedad civil. Es decir, hay un vacio que se traduce en malestar y descontento de la población contra el Estado.
Pero también son responsable de esta situación la clase política que ha gobernado el Perú en estas últimas décadas, por citar algunos partidos mencionamos: APRA, Partido Popular Cristiano, Acción Popular, Izquierda Unida, etc. Todos estos partidos no han podido renovar sus cuadros y han actuado más como club que como partido político.
El Apra, partido que gobierna actualmente, podría ser el único partido político con presencia nacional. Y por ello entendemos, un partido que tiene tradición, historia y programa de gobierno. Pero, por otro lado, dado que es un partido que nace en la década del '30, no se ha replanteado ideológicamente; es decir, no se ha definido si es de izquierda o derecha, sin embargo hoy en día actua como un partido de derecha, aunque sus directrices digan lo contrario. El APRA desde su fundación ha tenido una organización vertical y, actualmente, Alan García (presidente del Perú) es el gran patriarca y todos dicen AMÉN a todo lo que dice él.
Estamos a puertas de las elecciones regionales y municipales (2010) y el próximo año será las elecciones presidenciales (2011), por tanto, es importante y urgente analizar críticamente quienes gobiernan y cómo acceden a la cosa pública. De lo contrario, la clase política seguirá improvisando la forma de hacer política.
2 comentarios:
Creo que los partidos son muy determinantes dentro dee los sitemas politicos democraticos, ya que permiten ejercer un rol determinante para que exista Estado de Derecho. Sin embargo, los partidos se han trasnformado -y la historia lo demustra- en elites politicas ejerciondo un fuerte dominio del sistema politico. En palabras mas simples, el poder politico de un Estado queda monopilizado por un piñado de partidos que muchas veces forman colaiciones para concentrar aun mas el poder politico, tal como ocurre en Chile. Si no existen los partidos, tampoco hay democracia. Pero la democracia tambien se agota cuando hay concentracion de poder dentro de un sitema politico, donde solo dos coaliciones tienen reales chances de gobernar y participar del sistema como lideres y ejerciendo sus voluntades, quedando muy poco espacio real para prtidos menores o el mundo independiente. La cosa no ha sido muy distintas, simpre los movimientos o los partidos que nacen en la aurora de los sitemas politicos terminan por transformarse en elites.
En Peru, me imagino -tengo muy poca informacion sobre el caso- que no es muy distinto de lo que ocurre en Chile.
Saludos Alex
Concuerdo en que los partidos políticos son vitales para el sistema democráctico de un Estado. Incluso, comparto la opinión en que deben haber -y las hay- "elites", sean estas políticas o intelectuales.
Ahora, en lo que respecta a la concentración de espacios políticos, mediante partidos tradicionales, creo que merece un mejor análisis.
Brevemente podría citar el caso de Perú, en donde no existe concentración sino dispersión del espación político para llegar al poder. Esto mas que favorecer a sectores políticos menores, ha contribuido a la fragilidad del sistema político; y a esto hay que agregar la improvisión en hacer política.
En resumen, tanto la dispersión como la concentración del espacio político no son buenos. Sin embargo, es tarea fundamental la renovación de los partidos tradicionales, así como la consolidiación de los partidos nuevos.
Voy a dedicar más aldente otro post a este tema.
Publicar un comentario