jueves, 5 de noviembre de 2009

NIETZSCHE: THE BECOMING OF THE LIFE


Bajo ese título se desarrolló la conferencia internacional sobre uno de los más radicales filósofos del mundo: Nietzsche. Dicho evento fue organizado por el Instituto de Humanidades de la prestigiosa universidad chilena Diego Portales. Fueron tres días en donde participaron personas de casi todo el mundo, entre algunos países: EE.UU. , Suiza, Francia, Alemania, España, Holanda, Brasil, Perú, Argentina, etc. Hubieron mesas de trabajo así como conferencias magistrales. Creo que no es necesario nombrar a todos los expositores (o pueden visitar www.nietzsche.cl), pero podría destacar los siguientes: Debra Pergoffen (EE.UU.), Herman Siemens (Holanda), Gary Shapiro (EE.UU.), Mónica Cragnolini (Argentina).

Confieso que no soy un lector asiduo de Nietzsche, conosco poco de su obra, creo mas bien que he leído más a autores nietzschanos: José Carlos Mariátegui (Perú), José Ortega y Gasset (España), Michel Foucault (Francia), entre otros.

Definitivamente, Nietzsche es uno de aquellos filósofos que no espera ni busca discipulos, seguidores o “hinchas”; sólo busca camaradas o complices dispuestos a compartir aventuras, hazañas; tal como si fueran aves de rapiña. Después que uno lea a Nietzsche, estoy más que seguro, no lo encontrará de inmediato. No. El pensamiento de Nietzsche se manifiesta, por decirlo de la forma más vulgar, “con efecto retardante”, es decir puede tomar, días, meses, años, para entenderlo; pero cuando uno sienta su pensamiento, todo no volverá a ser lo mismo y nada será lo mismo.